Zulu de Zhumager!

Zulu de Zhumager!

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Leer con precaución, artículo no actualizado.
La primavera dio una tregua y finalmente luego de varias meteo-cancelaciones pude hacer mi primer vuelo de habilitación en el CX-AYZ un Cessna 172-B con control de flaps mecánico.
Unos minutos antes de las ocho de la mañana nos encontramos con Juan Villamil en el Hangar de Aeromont, era mi primera visita como piloto a SUMU y el movimiento de aeronaves en la zona de los hangares Sur Oeste era algo que siempre había visto del otro lado de la reja, estar allí me emocionaba.

Con el Instructor no nos conocíamos así que mantuvimos una charla introductoria donde yo le conté mi experiencia y luego hicimos un briefing de las operaciones que realizaríamos para que me familiarizara con el avión.

Dado que se trataba de mi primer vuelo desde Carrasco también repasamos las frecuencias y las calles de rodaje que utilizaríamos.
Admito, que de esto era de lo que más ganas tenía, hacia ya unos cuantos días que venía escuchando la frecuencia en live-atc Uruguay, había revisado el plano de aeródromo, consultado a otros pilotos que hicieron su curso allí, y utilicé el simulador de vuelo y Vatsim para acostumbrarme, lo cual me hacía sentir seguro sobre la fraseología y el tipo de tránsitos y situaciones que podía presentarse. Las demoras que se presentasen no me preocupaban ese día ya que todo formaba parte del entrenamiento y la adaptación a SUMU.

Al llegar a la plataforma SW debimos aguardar que un CRJ estacionara, pero luego pudimos avanzar por Charly hasta el punto de espera de 06/24 ya que una camioneta de Candysur se desplazaba por esta a alta velocidad y el controlador nos pidió que le cediéramos el paso para luego proseguir nuestro camino a la cabecera de la pista 19.

Al regresar de nuestro vuelo al ATZ de Adami donde realizamos varios toque y siga, practicamos vuelo lento, pérdidas y padrones de emergencia simulada, nos incorporamos al circuito de 19 y realizamos un toque y siga para finalmente proceder a una detención total.
A solicitud del controlador recortamos el circuito para así evitarnos tener que esperar que despegaran un par de vuelos comerciales.
(Un Aerolíneas Argentinas estaba a 90 cuando hicimos el primer toque y siga y un CRJ venía rodando por Charly.)
Con el circuito corto, aprovechamos la altura que manteníamos en Final para desplazar nuestro aterrizaje y así rodar menos.
Una de las cosas en las que me había mentalizado en el trayecto al aeropuerto era en estar ágil en las comunicaciones y en la operación en general.

En los talleres que este año dictaron los Controladores para pilotos en Aerotecno hicieron énfasis en la dificultad que conlleva lidiar con la diferencia de velocidades entre los aviones comerciales y los de instrucción, fundamentalmente en el tramo final de la aproximación donde los C-150 parecen flotar.

Por tal motivo no bajé la nariz y mantuve potencia una vez controlado el aterrizaje para liberar lo antes posible la pista. El controlador nos indicó que si apresurábamos podríamos liberar por la pista 06/24 pero luego al ver nuestra velocidad dijo:

“Zulu que velocidad!, puede liberar por Charlie”

(pensé en responderle) “Zulu de Zhumager” pero me acordé que estaba en un vuelo de habilitación, que el instructor no me conocía, y que ahora podrían escucharme por Live Atc.

Liberamos por Charlie como más nos convenía, y acordamos con Juan para hacer un vuelo a Canelones y culminar el entrenamiento allí.

Sin dudas fue una experiencia redonda, conocí una escuela e instructores nuevos, avancé en conseguir otro cuatriplaza para tener a disposición, y comprobé que con la suficiente planificación operar en Carrasco no debiera presentar mayores dificultades.

Martín Filippi

Martín Filippi
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Me gusta volar, me gusta su ciencia, la historia de los hombres y mujeres que hicieron realidad lo que parecía imposible. Me gusta lo que la experiencia o el anhelo del vuelo tiene el potencial de modificar en nuestra percepción de la realidad, de los límites, de los desafíos. Dedico una parte importante de mi tiempo libre a impulsar este proyecto, con la visión de que si nos lo proponemos, podemos desencadenar un cambio semejante en aquellos que todavía creen que para volar hacen falta alas.

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